Emociones en un estado puro de efervescencia a las 12:33 a.m.

“Gracias, gracias por venir” decían los que vestían de negro y con radio en mano abrian paso. Había que preparar el camino y sonaban ya los primeros acordes. Yo sabía bien el camino de regreso a nuestros asientos. En el trayecto llegué al pasillo por donde saldría a cantar pero tuve que moverme pronto de ahí. Pregunté la hora y marcaban las 12:33 a.m. A distancia pude ver que ya no había asientos por ocupar y que la algarabía aumentaba a cada minuto. Fué curioso, desde adentro la emoción de la espera se escucha diferente. Emmanuel estaba a segundos de salir a cantar. Se arreglaba el saco. No sé bien porque pero esa image me ha quedado grabada en mi memoria. En un parpadeo me ví ya sentado listo a vivir la experiencia RETRO una vez más. Había que entregar el Alma y el Corazón.