Fué durante la ceremonia de Premios Lo Nuestro en su versión 2007. Habia transcurrido una hora y todavía anunciaban antes de mandar a comerciales que Pepe Aguilar tenía una gran sorpresa ese día. Y cumplió: la sorpresa fué grande ese día.
Y llegó su turno. Pepe Aguilar, interpretaba "Todo se derrumbó" en su versión que a pesar de tener su estilo respetaba mucho la magia que le trasmité su intérprete original.
A mitad de la canción se empezó a escuchar una segunda voz inconfundible y única. A muchos se nos fué la voz de la emoción. Poco faltaba para ver a dos grandes en un momento memorable. Y aún sin aparecer Emmanuel nosotros ya gozabamos de la sorpresa.
"Es un placer compartir el escenario con el Maestro: Emmanuel". Así un pura sangre de la música, Pepe Aguilar, presentó al Señor de las Lunas en un encuentro que en ese momento era ya deseado. Vestido con traje oscuro con líneas de un brillo muy particular y su corbata a medio anudar muy a su manera Emmanuel emergió mientras ambos daban sentimiento a uno de sus grandes temas.
El Pura Sangre sabia lo que queria esa noche, y lo logró. Un escenario lleno de par en par de trayectoria, voz y carisma. No por nada le llamó "maestro". Emmanuel le ayudó a darle ese último toque mágico que la canción améritaba. El dueto fué perfecto.
Aunque esa noche se trató de un "Todo se derrumbo", realmente ambos lograron construir un momento muy especial . Un momentó que a todos nos hizo sentirnos vivos.
"en los detalles mas pequeños, hay que arrimar el corazón..."
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